Durante esta época del año el cuerpo humano pierde calor con más facilidad por las extremidades, como por ejemplo las orejas. El aire frío y seco puede deshidratar la piel y el tejido del oído interno, lo que puede causar dolor, inflamación y, en algunos casos, infecciones.
¿Cómo afecta el frío?
Nuestro cuerpo sabe cómo protegerse de los agentes externos porque tiene sus propios mecanismos. El frío exterior provoca la contracción de los pequeños vasos sanguíneos que se encuentran en el oído proporcionando oxígeno a la zona. Como consecuencia, el flujo de sangre al pabellón auditivo, es decir, a nuestros oídos, se reduce, por lo que la mala circulación puede provocar un desagradable dolor de oído.
A menor temperatura, mayor vasoconstricción, y por tanto mayor posibilidad de sufrir molestias en el interior del oído.
¿Cómo protegemos nuestros oídos?
Aunque el frío está presente durante muchos días esta temporada, según un estudio de Oi2, el 53% de la población reconoce no protegerse tanto como es necesario.
En estos casos podemos utilizar gorros u orejeras, que son grandes aliados para prevenir infecciones e inflamaciones de oído. Si practicas natación o deportes acuáticos, es recomendable utilizar protectores auditivos mientras realizas la actividad y secarte bien los oídos al salir del baño.
En estos casos, el tipo de tejido también es importante ya que la lana o los tejidos polares retienen mejor el calor y permiten la circulación del aire.
Puede reducir el riesgo de infecciones manteniendo los oídos calientes y secos cuando está al aire libre, pero también puede contraer infecciones virales o bacterianas que complican la situación.
La importancia de la higiene
Tener los oídos limpios también es una condición muy importante para no tener problemas en ellos. Recuerda que el uso de bastones es desaconsejable y cuando utilices auriculares, controla el tiempo de uso para evitar la obstrucción de la circulación del aire y aumentar el riesgo de infecciones.
Cualquier problema que note con su audición, llame a su audiólogo para abordar el problema lo antes posible.